En jóvenes, los tropezones frecuentes, acercamiento excesivo a la televisión, entrecierro de ojos, cansancio al escribir o dibujar, son algunos signos de alerta.
La vista desempeña un papel crucial en el proceso de aprendizaje, El 90% de la información de nuestro entorno llega a través de nuestros ojos, y según el MINSA, el 80% de ese proceso es aprendizaje. Por esta razón, a puertas del inicio de clases, es fundamental detectar y corregir cualquier anomalía visual desde el principio para asegurar un rendimiento académico óptimo.
Según el Dr. Raúl Swayne, especialista de Oftálmica Clínica de la Visión, los problemas oculares más comunes en la edad temprana incluyen defectos refractivos como la miopía, la hipermetropía, el astigmatismo, ambliopía (ojo vago), estrabismo y discromatopsia o daltonismo. La detección temprana de estos problemas visuales es fundamental, ya que permite una corrección adecuada y previene complicaciones a largo plazo.
“Cuando los problemas visuales no se detectan a tiempo, pueden afectar el rendimiento académico y deportivo de los niños, llevándolos a la frustración. Además, podrían manifestar conductas negativas como la rebeldía, tener dificultades en la sociabilidad y participar menos en actividades al aire libre. Es crucial abordar estos problemas para garantizar un desarrollo integral y saludable”, sostiene el especialista.
Problemas de vista más frecuentes en los niños
- Miopía: Dificultad para ver objetos lejanos claramente.
- Hipermetropía: Dificultad para ver objetos cercanos claramente.
- Astigmatismo: Visión borrosa o distorsionada, debido a irregularidades en la forma de la córnea.
- Ojo vago (Ambliopía): Pérdida de visión en un ojo. Ocurre cuando el ojo no recibe una estimulación visual adecuada durante los primeros años de vida.
- Estrabismo: Desalineación de los ojos; es decir cuando no apuntan en la misma dirección.
- Discromatopsia o daltonismo: Una alteración visual que afecta la percepción de los colores.
El especialista destaca la importancia de que los padres estén atentos a los signos que pueden manifestarse desde la infancia, como la falta de seguimiento visual en un bebé, aversión a la luz y desviación en la mirada. En jóvenes, tropezones frecuentes, acercamiento excesivo a la televisión, entrecierro de ojos, dolores de cabeza y cansancio al escribir o dibujar son indicadores clave que deben considerarse.
Exámenes Oftalmológicos
Hoy en día, se recomienda realizar exámenes oftalmológicos desde el nacimiento. Los pediatras son los profesionales indicados para detectar problemas de salud, y en caso de identificar algún problema ocular, derivan a un oftalmólogo especializado en el cuidado de los ojos de niños, conocido como oftalmólogo pediátrico.
“La primera evaluación oftalmológica se recomienda alrededor de los 3 años de edad, aunque en algunos casos puede ser antes si hay preocupaciones específicas o antecedentes familiares de problemas oculares”, indica el Dr. Swayne.
Durante esta evaluación, el oftalmólogo realizará pruebas para evaluar varios aspectos de la salud visual del niño, lo que contribuirá a abordar cualquier problema antes de que afecte su aprendizaje y desarrollo.
Fuente: Perú 21