La vista es una herramienta fundamental para el desempeño de cualquier actividad y cuidarla es clave para evitar que las enfermedades oculares interfieran en el éxito laboral de una persona.

Carlos Siverio Llosa, especialista de Oftálmica Clínica de la Visión, explica las afecciones que pueden afectar a los emprendedores y ofrece recomendaciones para prevenir o retrasar su avance.

Por ejemplo, está la presbicia, que afecta la capacidad de enfocar objetos cercanos y suele aparecer entre los 35-40 años. Las personas que pasan largas horas frente a la computadora pueden tener dificultades para leer letras pequeñas, afectando su productividad. Se recomienda el uso de lentes correctores o cirugía como soluciones efectivas.

Otra enfermedad es la glaucoma, que daña el nervio óptico debido al aumento de la presión ocular. Las personas con antecedentes familiares están en mayor riesgo, por lo que es crucial realizar exámenes periódicos de presión ocular a partir de los 35 años.

También está el ojo seco, un mal común entre quienes pasan muchas horas frente a dispositivos electrónicos, esta condición puede causar incomodidad y visión borrosa. Se aconseja parpadear con más frecuencia, usar lágrimas artificiales y evitar la exposición prolongada al aire acondicionado.

La carnosidad (pterigión) también es una enfermedad común y se da por la exposición prolongada al sol o ambientes polvorientos. Por ello, los emprendedores que realizan actividades al aire libre deben usar lentes de sol con filtro UV para protegerse.

Por sectores

El experto detalla cuáles son las enfermedades oculares que pueden padecer los emprendedores, según el sector en el que se desenvuelven.

• Sector textil y manualidades: La concentración en tareas detalladas incrementa el riesgo de presbicia y fatiga visual. Se recomienda utilizar iluminación adecuada y lentes con aumento específico.
• Negocios digitales o administrativos: Aquellas que gestionan negocios en línea son propensas a ojo seco y fatiga visual digital. Incorporar descansos frecuentes y usar lágrimas artificiales puede mitigar estos problemas.
• Agricultura y actividades al aire libre: Emprendedoras expuestas al sol deben usar protección UV y sombrero de ala ancha, para reducir el riesgo de desarrollar pterigión (carnosidad).
• Diseño gráfico y trabajos creativos: La exposición prolongada a pantallas brillantes puede causar fatiga visual y ojo seco; limitar las horas continuas de trabajo es recomendable.
• Gastronomía: Cocineras, panaderas o emprendedoras en el sector alimenticio están constantemente expuestas al calor, humo y vapores de la cocina, lo que puede provocar irritación ocular y, en casos prolongados, conjuntivitis crónica. Además, estas condiciones pueden aumentar el riesgo de desarrollar pterigión (carnosidad). Es esencial contar con una ventilación adecuada en el área de trabajo y usar gafas protectoras si están expuestas al humo de manera constante.
• Estética y belleza: Manicuristas, maquilladoras o estilistas que dedican largas horas a tareas que requieren precisión, como el diseño de uñas, delineados o tintes, están más propensas a sufrir fatiga ocular. Asimismo, la manipulación frecuente de productos químicos como esmaltes, sprays y tintes puede generar alergias oculares e irritaciones. Es importante utilizar gafas protectoras al trabajar con productos químicos y garantizar una ventilación adecuada en el entorno laboral para minimizar riesgos.

Fuente: Gestión