Es una noticia grata que nuestra expectativa de vida ha aumentado en las últimas décadas. Pero es un panorama menos agradable vivir una larga vejez con molestias y dolores. Por ejemplo: perdiendo la vista año a año o con una quemazón insoportable en los ojos.

A menos que empecemos a ver borroso o necesitemos lentes, casi siempre las visitas al oftalmólogo llegan tarde. Las realizan adultos mayores que necesitan atenderse de cataratas o glaucomas. Los más jóvenes solemos pensar que conseguir lentes de medida es suficiente atención para nuestros ojos.

Según el Dr. Juan Carlos Corbera de Oftálmica, Clínica de la Visión, gran parte de la población económicamente activa del Perú sufre de dos males: astenopia (fatiga visual) y síndrome de ojo seco. Ambas patologías se relacionan con la polución y el uso intensivo de pantallas de computadoras, tabletas, celulares.

Pero los ojos peruanos no son los únicos fatigados. La bioquímica Jane E. Brody escribió en su columna sobre salud de «The new York Times» que, según diversos estudios, son cerca de 70 millones de trabajadores en el mundo los que sufren del denominado «síndrome de la visión de computador». A diferencia de las palabras impresas que tienen márgenes definidos, la información electrónica se esparce sin límites claros sobre la pantalla, lo que dificulta que nuestros ojos mantengan un foco. Esa hiperactividad del músculo de acomodación del ojo lo fatiga.

El ojo seco, en cambio, se produce porque frente a la pantalla parpadeamos menos. Lo normal son 17 a más parpadeos por minuto, pero ante una computadora lo hacemos menos de 15 veces. Ese ritmo perjudica la lubricación y provoca la sensación de picazón, ardor, quemazón o hipersensibilidad ocular. Distintas profesiones dependen en la actualidad del trabajo con dispositivos electrónicos; sin embargo, siguiendo algunas de las recomendaciones que presentamos, podemos minimizar el desgaste de la vista.

CONSEJOS:

Si usas lentes, hazte un chequeo oftalmológico anual para que siempre lleves la medida adecuada.

Si trabajas frente a una pantalla, usa lentes aunque no tengan medida, pero sí filtros UV y antirreflex para la protección ocular.

Si experimentas sequedad en los ojos, aplica gotas lubricantes medicadas.

Tras cuatro horas frente a una pantalla toma un descanso. Cierra tus ojos y aléjate de la «compu» por 4 o 7 minutos.

ALGO MÁS:

Consumir vitamina A, betacaroteno y ácidos grasos (tipo omega 3) estimula una buena lubricación ocular. Algunos alimentos que los contienen son: hígado vacuno, zanahoria, brócoli, leche fortificada con vitamina A, pescados de carnes oscuras como el atún o bonito, salmón, semillas de linaza, chía y sacha inchi.

Fuente: Viú! El Comercio